Il Barça è la prova definitiva di un progetto di fessura
Rimbalza dalla Spagna la seguente news che riportiamo fedelmente a voi lettori poco avvezzi con la lingua spagnola:
El Inter de Milán apunta a ser un rival muy duro para el Barça. Por su estilo de juego, su experiencia en Europa y por el talento de sus jugadores. Así lo evidencia su excelente fase de grupos, en la que terminaron cuartos, y los triunfos en las eliminatorias frente al Feyenoord, en octavos, y al Bayern de Múnich, en cuartos. Que los recientes ‘pinchazos’ ante el Bolonia y la Roma en liga (1-0; 0-1), competición en eran líderes hasta este domingo (ahora segundos a tres puntos del Napoli), y el duro 0-3 contra el Milan en semifinales de Coppa no despisten a nadie. El proyecto es sólido, el sistema funciona y el trabajo en la sombra para volver a la élite europea es mayúsculo.
Todo el mundo sabe que el Inter de Simone Inzaghi es un equipo que ataca y defiende con orden, letal al contragolpe, con conceptos tácticos muy asentados y con una capacidad competitiva que, a doble partido, puede hacer daño a cualquiera. La realidad actual del club de Milán es notable, pero no hace tanto que el equipo sufría en una etapa muy oscura.
Hasta 2018, los nerazzurri encadenaron ocho temporadas lejos de la élite, finalizando a, como mínimo, 20 puntos de la Juventus en la Serie A. La llegada de Giuseppe Marotta lo cambió todo. En su primer año, el director deportivo italiano apostó por un entrenador con carácter como Antonio Conte. En la temporada 2019-20, casi lograron tumbar a la Juve, quedándose a un solo punto del Scudetto. Empezaban a brotar señales de recuperación.
De Conte a Inzaghi
El Inter tocó el cielo en la temporada 2020-21. Ganó la Serie A con 13 puntos de ventaja y firmó el inicio de un nuevo ciclo. ¿La clave? Una reconstrucción quirúrgica de plantilla liderada por Giuseppe Marotta: fichajes a bajo coste, perfiles comprometidos y una apuesta por futbolistas capaces de rendir desde el primer día. Inversión mínima, impacto máximo. El dirigente italiano supo mezclar como pocos el hambre de jóvenes promesas -algunas de ellas, hoy estrellas mundiales- con la fiabilidad de veteranos curtidos en mil batallas. Una combinación infalible que devolvió al club su identidad.
Las mejores operaciones de Marotta (2018-2021)
Sin embargo, el Inter, que quiso mantener su filosofía de operaciones en el mercado, ‘chocó’ con la visión de Antonio Conte, que quería fichajes más caros e inmediatos. Fue entonces cuando Simone Inzaghi tomó las riendas del equipo, en el verano de 2021. Casi cuatro años después, no parece exagerado afirmar que el Inter debería ser un modelo a seguir para otros clubes en cuanto a su estrategia deportiva.
Simone Inzaghi, intercood / DANIEL DAL ZENNARO / EFE
El club italiano ha demostrado tener una capacidad única para tomar decisiones difíciles, como no tener miedo a vender jugadores si consideran que su ciclo ha llegado a su fin o cuando la oferta es irrechazable. Luego, meditan con precisión sus movimientos en el mercado, basándose en criterios muy concretos: un encaje total en el sistema, la madurez futbolística del jugador (no necesariamente vinculada a su edad) y, por supuesto, la posibilidad de un rendimiento inmediato. Además, el Inter mantiene un rastreo constante del mercado para fichar jugadores a coste cero o aprovechar oportunidades claras.
Las mejores operaciones de Marotta (2021-actualidad)
La tendencia se ha mantenido verano tras verano, permitiendo que la plantilla del Inter se enriquezca cada temporada sin comprometer la economía del club. Después de caer en la final de la Champions League en 2023 ante el Manchester City, los nerazzurri están decididos a dar el golpe definitivo en esta edición. Su once inicial, además de contar con un nivel altísimo, es el reflejo perfecto de casi ocho años de trabajo bien hecho.
Una plantilla de élite a precio de risa
Comenzando por el portero, Sommer, se trata de un guardameta de primer nivel que llegó por solo 7 millones de euros, después de que el club vendiera a Onana por 50 ‘kilos’. Al camerunés lo habían fichado libre un año antes. En defensa, entre Bastoni, Acerbi y Pavard, se gastaron menos de 70 millones de euros. Se entienden perfectamente, pueden adaptarse a cualquier rol en la línea de tres y son extremadamente sólidos y buenos rompiendo líneas. Bastoni está considerado actualmente uno de los mejores en su puesto.
Bastoni contro Bologna / AP
En los carriles, Di Marco y Darmian no superan los 10 millones entre ambos. Son jugadores con experiencia, buen pie, rápidos y capaces de ofrecer exactamente lo que Inzaghi pide. Di Marco, el más destacado de los dos, tiene una zurda envidiable.
En el centro del campo, el ‘sello Marotta‘ está presente con Barella, Calhanoglu y Mkhitaryan, tres futbolistas de élite que, entre los tres, no suman ni 40 millones de euros. Los dos últimos llegaron gratis al club. Tres jugadores espectaculares, con un gran nivel técnico, espíritu de sacrificio y capaces de marcar diferencias con sus disparos o pases. Tanto el turco como el armenio, que en el pasado jugaban más adelantados, han ofrecido un rendimiento tan impresionante como inesperado bajo las órdenes de Inzaghi.
En el ataque, el Inter cuenta con una ‘dupla’ sencillamente sublime: Lautaro-Thuram. El club desembolsó 25 millones de euros por el argentino y el galo llegó gratis a la entidad. La pareja es una de las mejores de Europa, y encaja perfectamente con el estilo de juego de Inzaghi. Rápidos, fuertes, asociativos y con una capacidad de finalización letal, Lautaro y Thuram pueden romper un partido con una sola ocasión.
Lautaro Martínez e Marcus Thuram celebrano un goal dall’Inter / EFE
A un paso de la final de la Champions y volviendo a imponer respeto en Italia, se puede asegurar que Marotta ha resucitado al Inter. El club, que parecía perderse en la sombra de la Juventus, ha encontrado su identidad y, sobre todo, su estrategia. Fichajes a largo plazo, jugadores europeos de primer nivel adquiridos a bajo coste, veteranos que aportan experiencia y oportunidades de mercado que otros no ven.
Este Inter no es solo una plantilla sólida, sino una obra maestra de gestión deportiva, donde cada decisión se analiza minuciosamente para maximizar el rendimiento sin malgastar el dinero. Con una mentalidad fría y calculadora, han sabido navegar en un mercado cada vez más inflado y despiadado, y ahora, casi cuatro años después de la llegada de Simone Inzaghi, amenaza con dar el golpe definitivo.
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